Como parte de los avances de la Línea 4 del metro, el pasado sábado se llevó a cabo la demostración de colocación de una de las trabes para este nuevo transporte.
Con esto, se comienza a dar forma al viaducto elevado de este ramal del sistema de metro en la urbe regia.
El ingeniero encargado y gerente de la obra, Raúl Martínez, detalló que, con el fin de afectar lo menos posible a la vialidad, los trabajos se realizan durante la noche.
Aproximadamente a las 20:30 horas se cerró el carril exprés de Constitución con el fin de introducir las maquinarias y empezar con la jornada, que dura hasta las 5:00 horas del día siguiente, cuando se reabra el carril.

Se mencionó que este cierre es exclusivamente en la noche, pero que los diferentes trabajadores continúan laborando las 24 horas de lunes a viernes e incluso algunos domingos.
“Las trabes viajan de noche por seguridad, por tránsito y por reglamentación, incluso de los municipios. Estamos en una zona urbana con mucho tráfico, y estas son trabes de 28 metros de largo, 20 de peralte y 69 cm de ancho; además, pesan 70 toneladas cada una”, mencionó Martínez.
El proceso para la colocación de cada viga llega a durar hasta tres horas, y se coloca con la ayuda de dos grúas de material pesado, así como cuatro personas que suben hasta 18 metros para colocarlas.
“Con topografía se lleva a cabo su posición final; eso tarda ya un poquito más de tiempo, como tres horas. El embalaje es muy rápido, entre 10 o 15 minutos, y el posicionamiento ya son dos o tres horas”, apuntó Martínez.

Se estima que esta línea se concluya para finales del 2026, beneficiando en los traslados de los regiomontanos. Con información de el Horizonte