Presentan a ciudadanos Tramo 6

Comparte esta nota
Me gusta esta nota

El tramo 6 del Tren Maya, que va de Tulum a Chetumal, en Quintana Roo, es viable ambientalmente, cumple la legislación mexicana y tratados internacionales en la materia; además, generará beneficios a la población y logrará la integración regional y estatal con el resto del país.

Así lo resumió el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (FONATUR), al presentar la Manifestación de Impacto Ambiental elaborada por el Instituto de Ingeniería de la UNAM, durante ls Reunión Pública de Información convocada por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y realizada en el ejido X-Hazil, municipio de Felipe Carrillo Puerto.

Durante la exposición de la MIA a ejidatarios, comuneros y población en general de los municipios de Tulum, Felipe Carrillo Puerto, Bacalar y Othón. P. Blanco, comprendidos en el tramo 6, se explicó que el tren correrá paralelo a la Carretera Federal 307 Cancún–Chetumal y tendrá longitud de 255.5 kilómetros, entre las ciudades de Tulum y Chetumal.

A lo largo de este trayecto se instalarán estaciones, paraderos y obras complementarias como 138 pasos de fauna y 56 pasos vehiculares; drenaje transversal, cinco laderos, una base de mantenimiento, cocheras y talleres.

El tramo 6 del Tren Maya conectará los principales centros urbanos con la infraestructura aeroportuaria y los destinos turísticos históricos y culturales más atractivos, logrando la integración regional y estatal con la actividad económica del resto del país.

En el encuentro, personal de FONATUR y del Instituto de Ingeniería de la UNAM subrayaron que la MIA prevé programas y acciones ante posibles impactos durante la preparación del sitio, construcción, operación y mantenimiento del proyecto, algunos de los cuales serían temporales y otros se pueden prevenir, mitigar y/o compensar.

Destacaron que el proyecto del Tren Maya cumple lo establecido en la legislación ambiental, sus reglamentos, normas oficiales mexicanas y en los tratados y convenios internacionales en la materia; igualmente, se apega a las buenas prácticas de ingeniería.

Para la evaluación del proyecto, el Instituto de Ingeniería de la UNAM estableció un Sistema Ambiental Regional (SAR) de 12 mil 712 kilómetros cuadrados en los que tomaron en cuenta las elementos naturales y físicos de la región para identificar las zonas de importancia ecológica y funcional del entorno natural y sus relaciones con la actividad humana.

Durante la Reunión Pública de Información se presentaron diversas ponencias por parte de personas interesadas en el tema, y se contestaron preguntas de los asistentes.